Concierto estrella de La Filarmonica

Intérpretes

  • Orquesta Sinfónica del Teatro Mariinsky
  • Daniil Trifonov, piano
  • Valery Gergiev, director

Valery Gergiev
foto: Marco Borggreve

 

Daniil Trifonov, Pianista

 

 

 

 

 

 

 

Programa

  • Debussy, Prélude à l’après-midi d’un faune
  • Rachmàninov, Concierto para piano núm. 1, en fa sostenido menor, op. 1
  • Mahler, Sinfonía núm. 5

Jueves 14 de marzo de 2019 | 20.30 h | Sala Sinfónica del Auditorio Nacional

Más información

GERGIEV, EL DIRECTOR INALCANZABLE

Desde que Valery Gergiev se hizo cargo del Teatro Mariinsky en 1978, tuvieron lugar dos procesos en paralelo: la construcción del centro musical más grande del mundo y posiblemente más grande de la historia, como es actualmente el Mariinsky de San Petersburgo y, en segundo lugar, el cultivo más grande de repertorio de ópera y sinfónico que tenga hoy ningún director vivo. Por eso, Valery Gergiev es un director inalcanzable.

DANIIL TRIFONOV, UN TERREMOTO PIANÍSTICO

Desde que Trifonov ganó el concurso Chaikovsky, su carrera se ha convertido en una verdadera explosión mundial. Con presencia en las mejores orquestas del mundo, demandado por los directores más grandes y con residencias en la Filarmónica de Berlín, el Carnegie Hall de Nueva York y el Festival de Lucerna… Daniil es un verdadero terremoto pianístico.

BIOGRAFIAS

ORQUESTA SINFÓNICA DEL TEATRO MARIINSKY

La Orquesta Sinfónica del Teatro Mariinsky es una de las formaciones musicales más antiguas de Rusia. Su historia se remonta a principios del siglo XVIII, en el momento de máximo desarrollo de la Capilla de la Corte. En el siglo XIX, la orquesta adquirió gran protagonismo gracias a Eduard Nápravník, quien la dirigió durante más de medio siglo.

La excelencia de la orquesta fue reconocida en numerosas ocasiones por los músicos de renombre internacional que la dirigieron, como Berlioz, Wagner, Von Bülow, Chaikovsky, Mahler, Nikisch y Rachmaninov. Durante la era soviética, la formación mantuvo también una impresionante trayectoria con directores como Vladimir Dranishnikov, Ari Pazovski, Yevgeni Mravinski, Konstantin Simeonov y Yuri Temirkanov.

La orquesta tiene el honor de haber estrenado gran cantidad de obras de Chaikovsky, óperas de Glinka, Mussorgsky y Rimsky-Korsakov y ballets de Shostakóvich, Khachaturian y de Asafiev.

Desde el año 1988, la orquesta ha sido dirigida por Valery Gergiev; con la llegada del maestro, el repertorio de la orquesta se ha ampliado significativamente, y actualmente incluye la totalidad de sinfonías de Beethoven, Mahler, Prokófiev y Shostakóvich, los réquiems de Mozart, Berlioz, Verdi, Brahms y Tishchenko, además de varias obras de compositores como Stravinsky, Messiaen, Dutilleux, Henze, Shchedrin, Gubaidulina, Kancheli y Karetnikov. La orquesta ha actuado en los escenarios internacionales más prestigiosos.

DANIIL TRIFONOV, piano

Ganador del Premio Gramophone en la categoría de “Artista del año 2016”, el pianista Daniil Trifonov ha realizado un espectacular ascenso en el mundo de la música clásica. Recientemente, ha añadido a su considerable lista de galardones el Premio Grammy en la categoría de “Mejor Solista Instrumental”, que ganó gracias a su doble álbum dedicado a Liszt llamado «Trascendental», el tercer proyecto que realiza como artista exclusivo del sello discográfico Deutsche Grammophon.

Este año, Daniil Trifonov ha inaugurado la temporada 2018-19 de la Filarmónica de Nueva York, interpretando el Concierto para piano, en sol mayor de Ravel y el Concierto Emperador de Beethoven, bajo la dirección del nuevo director titular Jaap van Zweden. A lo largo de esta temporada, el pianista tiene varios compromisos señalados, como su retorno al Stern Auditorium del Carnegie Hall, donde interpretará el Concierto para piano de Schumann bajo las órdenes de Valery Gergiev, con quien colabora habitualmente; así como su retorno como artista residente a la sala Musikverein de Viena, o su residencia artística en la Filarmónica de Berlín, donde además de en recital y en música de Cámara, interpretará el Concierto de Scriabin bajo la dirección de Andris Nelsons.

Trifonov acaba de lanzar su nuevo álbum «Destination Rachmaninov: Departure», siempre con el sello Deutsche Gramophon, que incluye los Conciertos para piano núm. 2 y 4 de Rachmaninov junto con la Orquesta de Filadelfia y Yannick Nézet-Séguin. En recital, esta temporada, Trifonov interpretará Beethoven, Schumann y Prokófiev en Nueva York y Berlín; además, estrenará su propio Cuarteto para piano en Cincinnati con el Arial Quartet. También realizará recitales de Lied junto a su compañero habitual, el barítono Matthias Goerne.

VALERY GERGIEV

Valery Gergiev, vívido representante de la escuela de dirección de San Petersburgo debutó como director en el Teatro Mariinsky en 1978. Diez años más tarde fue nombrado Director Musical del Teatro y en 1996 se convirtió en su director general y artístico. Con su llegada, se llevaron a cabo todo tipo de representaciones, no sólo de partituras conocidas sino también de obras raramente interpretadas o nunca puestas en escena.

Gracias a los esfuerzos de Gergiev, el Teatro Mariinsky presentó las óperas de Wagner y el año 2003, la tetralogía completa de El Anillo de los Nibelungos: fue la primera producción rusa integra de la obra después de un intervalo de casi un siglo y la primera representada en su lengua original.

El Teatro Mariinsky se ha convertido en un gran referente; los proyectos realizados incluyen retransmisiones por radio, televisión e internet además de la creación de un estudio de grabación. La Orquesta del Mariinsky también ha evolucionado, asimilando un extenso repertorio de música sinfónica que incluye obras de Beethoven, Brahms, Chaikovsky, Mahler, Prokófiev y Shostakóvich, entre otros.

De 1995 a 2008, Gergiev fue director principal de la Filarmónica de Rotterdam (sigue siendo su director honorario), y de 2007 a 2015 de la London Symphony Orchestra. Desde el otoño de 2015, es titular de la Filarmónica de Múnich y desde 2018, de la Orquesta del Festival de Vervier.

Estas actividades le han otorgado prestigiosos reconocimientos estatales en Rusia, Armenia, Japón y otros países de la Unión Europea.

Sobre La Filarmónica, Sociedad de Conciertos

LA FILARMÓNICA, SOCIEDAD DE CONCIERTOS

La Filarmónica ofrece grandes conciertos con los mejores artistas de la actualidad del panorama internacional. Su programación abarca desde el barroco al siglo XX, de la gran orquesta sinfónica al recital más íntimo y está pensada para que los amantes de la música disfruten de ella con los mejores intérpretes de cada repertorio.

“That which is not»

Win Mertens, piano y composición

Diversos solistas instrumentales

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Vuelve Win Mertens, con más de cuarenta años de carrera a sus espaldas, con un notables disco compacto  instrumental, variopinto, novedoso, sugerente y donde el piano, ostentando un papel relevante, no tiene siempre la voz principal. Se trata de un disco abierto, crisol de diferentes estilos, cuyos temas, deliberadamente distintos y debidos a diversas estéticas, podrán ser o no del gusto de todos, pero nunca dejan indiferente al oyente y entre los que tenemos que destacar el verdaderamente formidable, bellísimo tema “Nested Cuts”, de aire barroco, melódico y melancólico, pero que se va transformando en un canto alado, intemporal, sublime.Solamente por este soberbio tema merecería hacerse con este disco compacto donde la personalidad de Mertens se hace patente y con ello podemos recurrir al viejo tópico “los viejos rockeros nunca mueren”. Disco bien grabado y producido, sin alcanzar lo excepcional en este campo.

LUIS AGIUS

Evolution”

Alexis FFrench, piano y composición

Orquesta Filarmónica de Praga

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SONY presenta un disco compacto del pianista británico Alexis FFrench, una estrella emergente en el campo de la nueva música instrumental, melódica y tonal, como ya lo es Riopy en Francia y que sigue la estela y el estilo del gran Ludovico Einaudi, pianista y compositor cuyo éxito en los últimos años ha sido espectacular, especialmente desde que su maravillosa música apareció en la B.S.O de la película “Intocable” un gran éxito de taquilla a nivel europeo. FFrench nos demuestra que es un pianista versátil, de limpio y claro estilo, con melodías envolventes, de gran lirismo y que cautivará al oyente por su nobleza y sencillez compositiva y expresiva. Desde luego no supera a Einaudi ni a Michael Nyman, pero se sitúa muy cerca de la otra gran estrella del teclado actual en este estilo musical, Riopy. Extraordinario acompañamiento de la Orquesta Filarmónica de Praga y magníficos arreglos orquestales.Los solos son, sin embargo, especialmente atractivos, por su intimismo y delicadeza. Disco de fácil escucha, muy cálido y sugerente. Excelente grabación.

LUIS AGIUS

IDOMENEO,” de Wolfgang Amadeus Mozart ópera en tres actos

Munich, 1781

Libretto:Abate Varesco

Función del 25 de Febrero de 2019,

Teatro Real de Madri

Producción de la Canadian Opera Company,Opera di Roma y Opera Real danesa y Teatro Real

Dirección de escena:Robert Carsen

Escenógrafo Luis F.Carvalho

Director de movimiento figurantes Marco Berriel

 

Elenco

Idomeneo Eric Cutler

Idamante David Portillo

Olia Annete Fristch

Elettra Eleonora Buratto

Arbace Benjamin

 

Coro y Orquesta del Teatro Real

Ivor Bolton, director musical

Posiblemente el mayor compositor de la historia de la ópera fue Mozart.De entre sus espléndidas 21 óperas, la primera que podemos calificar de obra maestra absoluta y de “madurez”, vastas dimensiones, con inclusión de grandes coros, magníficas arias, y números concertantes sublimes  es “IDOMENEO, rey de Creta”, una tragedia con libreto del abate Varesco, con el que Mozart tuvo muchas dificultades, que sin embargo el genio de Salzburgo sorteó con soltura,  ofreciéndonos como resultado una ópera formidable, la última ópera “seria” en el sentido de la ópera francesa del siglo XVIII y la cultivada por Gluck y los compositores franceses e italianos, llena de recitativos que detenían la acción dramática, superándolos con creces,.En Idomeneo si bien esos recitativos se incluyen por Mozart previos a las arias,, están adornados o limitados por acompañamientos ciertamente melódicos, que crean una atmósfera dramática, para dar lugar a continuación a soberbias arias o coros.

La interpretación que tuvimos ocasión de ver y escuchar en el Real fue debida de nuevo al prestigioso director de  escena Robert Carsen que volvió a ofrecernos como en el caso anterior (El oro del Rhin) una puesta en escena, trasladada a otra época, en esta caso a la época actual.Se trató de una puesta en escena limpia, con proyecciones convencionale (mar, playa, oleaje, etc) que no molestaron al espectador, pero un tanto feísta en el vestuario y escaso atrezzo, ambientada en un supuesto  conflicto bélico en el Oriente Próximo, y donde los troyanos aparecían como inmigrantes e Idomeneo e Idamante los cretenses, con el ejército de una potencia europea, que les impide el paso a Europa. El movimiento de soldados, e inmigrantes-troyanos, con un nutridísimo número de figurantes en algunos momentos fue caótico y en otros bastante rígido, confuso en general. En todo caso, si bien esto fue ajeno a la música por completo y nada aportó a la eximia ópera mozartiana, el triunfo de la propia música y de los cuatro cantantes principales , tanto las sopranos Fritsch como Ilia y la mezzo Burlatto como Eletrra y los tenores Cutler como Idomeneo y Portillo como Idamante, todos en muy buen nivel, -especialmente las solistas femeninas, ambas de bello timbre y magnífica prestación vocal y teatral-, nos hicieron olvidar la convencional puesta en escena (con aciertos parciales, como la sombra de Idomeneo trágica y desafiante ante Neptuno, o los chalecos salvavidas desperdigados por escena, etc) y centrarnos en lo que de valor tuvo la función que fue la música.Por otro lado, el Coro del Teatro Real, con demasiados efectivos, cantó con efusión pero resultó un tanto plano y excesivamente masivo, chillón en ocasiones, máxime si tenemos en cuenta que la orquesta estaba reducida a la  plantilla habitual en Mozart (unos 60 músicos). Ivor Bolton dirigió con nervio, vis dramática, y fidelidad al estilo, marcando el ritmo muy acertadamente, con tendencia a la cuadratura, insuflando la debida emoción a la música de Mozart, si bien en algunos momentos le faltó refinamiento y exquisitez en el acompañamiento a los cantantes y los tapó con un excesivo volumen orquestal. En definitiva, lo mejor, el gran, eterno e irrepetible Wolfgang Amadeus Mozart, que se impuso a los hombres, frágiles y volubles y a la cólera injustificada de los dioses.

LUIS AGIUS

SIMONE KERMES canta famosas arias de óperas y oratorios de

G.F.Haendel

Orquesta barroca  «Amici veneziani»

Boris Begelman, concertino

SONY CLASSICAL  190775861772

La gran soprano alemana Simone Kermes, gran especialista en el repertorio barroco, nos ofrece una espléndida interpretación de todo un ramillete de maravillosas y célebres arias de operas y oratorios de Georg Frederich Haendel, con las que este maestro he devenido inmortal: Rinaldo, Julio Cesar, Teseo, Rodelinda, Amadis de Gaula, El triunfo del tiempo y del desengaño, etc. Kermes luce  en todo momento su prístina voz, de un bellísimo timbre, con fraseo cuidadoso, delicado, muy bello, exquisito, desplegando en su caso un notable virtuosismo vocal.Sin embargo, más que tratarse de un disco de exhibición vocal, nos encontramos ante una selección de música donde reina el deleite, la serenidad y la exquisitez barroca.El acompañamiento del conjunto instrumental con instrumentos de época Amici veneziani es riguroso, brillante, delicado y absolutamente fiel al estilo .Sensacional grabación. Impescindible para los amantes del barroco y para quienes quieran conocer y disfrutar de estas joyas haendelianas, de conocimiento imprescindible.

 

LUIS AGIUS

Por Luis Agius

EL ENIGMA DE LEA: «EL EXITO DE UNA OPERA DE VANGUARDIA NO ES UNA POSIBILIDAD SINO UNA REALIDAD»

Rafael Argullol (1949) es ensayista, escritor, pensador, catedrático y autor del texto que sirve de base a la ópera “El Enigma de Lea”, a la que ha puesto música el compositor Benet Casablancas y que se ha estrenado en el Liceo de Barcelona con gran éxito de público y división de opiniones en la crítica.
Argullol, una de las grandes personalidades de la cultura de nuestro país, se acerca al PARNASO DE LAS ARTES y responde a las cuestiones que le planteamos sobre su experiencia operística y sobre su obra “El enigma de Lea” que ha publicado la prestigiosa editorial Acantilado.

PARNASO: Muchas gracias, Rafael por visitar el Parnaso de las Artes, es un gran honor para esta revista. ¿Qué lo motivó a escribir un texto para una ópera y por qué no le gusta llamarlo “libreto”?

R. A.: Sencillamente porque no lo es. En noviembre de 2011, Benet Casablancas me propuso hacer una ópera sobre un texto mío ya existente. Me quedé un tanto sorprendido y después pensé que era mejor escribir un texto nuevo y original. Desde el principio, Benet y yo mismo acordamos que debía tratarse de una ópera en la estela de Monteverdi, en la que la música y la poesía estuvieran en pie de igualdad. Si concebimos la ópera no como un mero soporte textual, el concepto de libreto es desafortunado y peyorativo. Con El Enigma de Lea, se trataba de recuperar el espíritu de la ópera, donde el texto no es un simple complemento. Por ello, mi escrito no se ajusta a la idea tradicional de “libreto”.

Parnaso: Si dijéramos que se trata de un texto no dramático, discursivo y filosófico, ¿estaría de acuerdo con estas afirmaciones?

R. A.: No. Se trata de un texto transversal, que establece una simbiosis continua de sensaciones e ideas. La filosofía para mí es narrativa. Cuando escribo un texto, lo hago pensando en su fusión con la música, en una trama, un argumento que tiene una estructura progresiva. Me parece absurdo una ópera sin ideas

Parnaso: Si nos refiriéramos a las óperas de Mozart-Da Ponte o de Schikaneder-Mozart , es decir , La flauta Mágica, ¿se sentiría identificado con esta forma de creación operística?

R. A.: No. El libreto de la Flauta es muy interesante, caótico, con elementos de iniciación masónicos muy atractivos, pero no me identifico respecto de mi labor en el texto de mi ópera. En el caso de Da Ponte, aun apreciándolo mucho como escritor y libretista, no tiene nada que ver con lo que he hecho junto a Benet Casablancas. De todas formas, tampoco me identifico con un cierto estilo actual de escribir textos para óperas contemporáneas, o “texto collage” a base de fragmentos dispersos o diferenciados, sin estructura. Puedo identificarme, es cierto, con Hugo von Hoffmansthal y con Stefan Zweig con sus textos o libretos para óperas de Richard Strauss, pero indudablemente mi opinión es que debe fusionarse texto y música y no me inspiré en ningún repertorio ni ópera o escritor en concreto.

PARNASO: Rafael, ¿considera usted que la ópera es un medio muy adecuado para la difusión de ideas? ¿Qué supone para un pensador involucrase en el mundo de la ópera, que tiene mucho de espectáculo, querámoslo o no? ¿Qué opina sobre los que critican la introducción de ideas o conceptos filosóficos en la ópera o el teatro, y acusan a los autores de estos textos o libretos de discursivos y anti-teatrales?

R. A.: A los que critican un teatro de ideas los invitaría a leer a los griegos y a Shakespeare. Es una cuestión de ignorancia. Por otro lado, la ópera del siglo XIX me parece un poco anacrónica. La ópera del siglo XXI, entendida como un espectáculo total, hay que acercarla a nuestra época: como no han de ser necesariamente cantables los textos o poesías que contiene, es adecuado que haya conceptos e ideas filosóficas

PARNASO: ¿Qué posibilidades tiene “El enigma de Lea” como ópera de vanguardia de llegar verdaderamente al gran público?

R. A.: No tiene posibilidades o mejor dicho ya es un éxito. El Liceo ha estado lleno a rebosar en todas las funciones y ya no debemos hablar de hipótesis sino de realidades. Una ópera contemporánea ha sido un éxito, que se ha producido, a través del boca-oreja. El resultado ha sido absolutamente satisfactorio. Podría y puede atraer perfectamente al gran público como toda ópera que se haga bien, basta con eso.Tengo esperanzas muy fundadas de que pueda verse en otros teatros.

PARNASO: Sin embargo, el panorama de la ópera, respecto de la ópera contemporánea, es complejo. Los programadores y directores artísticos tienen que contentar a todos los públicos y ofrecer tanto óperas del repertorio en montajes de “cartón piedra” como óperas de vanguardia que no son del gusto del público más conservador. Por otro lado, es obvio que estamos en un momento en el que prima la concepción de la cultura como espectáculo y, además, como espectáculo trivial. ¿Cómo ve Rafael Argullol el panorama cultural en España, en este aspecto y en general?

R. A.: Tanto el panorama cultural como el social lo veo dominado por la trivialidad y la ignorancia. Todo lo que va más allá del impacto parece muy arriesgado, pero, si no se arriesga, es lo mismo que en una clase o una conferencia, si bajamos el listón. Lo que hay que hacer es no ceder a una lectura de la existencia maniquea y trivial. Hay que transmitir la idea de que la Cultura es un instrumento esencial para vivir una existencia más placentera y dichosa. Lo que sucede en España en particular es que la Cultura se ve con menosprecio.Es algo que no he visto en ningún otro país de manera tan acusada. Se puede ser más o menos inculto, pero el nuevo “riquismo” y el simplismo que se traslada también a la política y a la educación es muy negativo. La respuesta está en contrarrestarlo.

PARNASO: Dado el éxito de esta aventura operística, ¿va a escribir Rafael Argullol otro texto para la ópera?

R. A.: Lo cierto es que no lo sé, me gustaría, pero es mucho trabajo y, además, me gusta ir renovándome. Es cierto que he tenido un par de ofertas y quizá es posible

PARNASO: Muchas gracias Rafael, enhorabuena y esperamos en todo caso cualquier otro texto o libro sobre temas filosóficos, estéticos, ensayos, etc. Libros como Viaje al fondo del mar, excepcionales, nos harán la espera más llevadera.

“Puccini in love

ALEZANDRA KURZAK, soprano

ROBERTO ALAGNA, tenor

Grandes escenas (duos) de óperas de Giaccomo Puccini (Tosca, Madama Butterfly, Manon Lescaut, La Boheme, la Fanciulla del West, La Rondine, Il Tabarro)

Orquesta Sinfonia Varsovia

Riccardo Frizza, director

SONY CLASSICAL 19075859832

★★★★

Los amantes de la ópera y de la maravillosa música de Puccini en particular están de enhorabuena con la publicación por SONY CLASSICAL de un disco compacto dedicado  a grandes escenas “a dúo” (escenas “de amor” ,como reza el título del cd, un tanto cursi, “Puccini enamorado”) que pertenecen a famosas y magníficas óperas del gran compositor italiano y que éste consagró a las voces de soprano y tenor y que corresponden en casi todos los casos a los grandes roles protagonistas puccinianos. En el caso de la voz de soprano, hablamos de Tosca, Madama Butterfly, Manon, Mimí, etc y en el caso del tenor a los “dramatis personaea” de Mario Cavadarossi, Pinkerton,  Rodolfo, etc. En el presente compacto la asunción de tales papeles corresponde  a las voces de dos estrellas rutilantes del panorama operístico actual, la soprano Alexandra Kurzak y el ya veterano  tenor Roberto Alagna, que cantan espléndidamente estos “dúos” o escenas a dúo, con ardor, pasión, ternura, emotividad y “vis dramtática”.A destacar la soberana prestación vocal de la excelente Kurzak, soprano dramática de poderosos medios vocales, pero capaz de cantar con lirismo e intimismo, voz carnosa de timbre muy bello, sin sobreactuar en ningún momento. Los papeles que asume son algunos de los más difíciles, tanto técnica como dramáticamente de la historia de la Opera y sale completamente airosa de ello.Por su parte, Alagna, menos dotado de medios vocales, luce su bello timbre, si bien a veces se resiente por la dificultad técnica y está forzado e incómodo, pero es cierto que lo suple con notable pasión y un indiscutible talento dramático. El acompañamiento orquestal es excelente, brillante, colorista y a ratos, espectacular, debido en gran parte a la magnífica batuta de Riccardo Frizza, buen conocedor de este repertorio ,sólido y experto director, que arropa y contagia de entusiasmo y energía a los cantantes. Sensacional grabación.

LUIS AGIUS

 

Concierto de Año Nuevo 2019

Filarmónica de Viena

Christian Thielemann, director

SONY CLASSICAL  2 CD 19075902822

 

En tiempo récord nos llega en todos los formatos audiovisuales posibles de la mano de SONY la grabación del tradicional Concierto de Año Nuevo de la Filarmónica de Viena,  del 1 de Enero de 2019, el concierto más famoso del mundo, en esta ocasión bajo la batuta del maestro alemán Christian Thielemann, un reputado intérprete wagneriano y uno de los directores más cotizados de la actualidad.El disco compacto recoge fielmente el concierto, que  fue absolutamente extraordinario y de gran interés por alternarse en el programa tanto el repertorio más transitado de valses , polcas, etc de la familia Strauss, como el más infrecuente.De este modo, Thielemann escogió con notable acierto el bellísimo vals de Johann Strauss “Nordseebilder” (“Vals de paisajes del mar del Norte”) raramente tocado, así como otras piezas de Edmund Strauss, deliciosas y de Josef Strauss (“Oper Soirée”, “La bailarina”) así como del compositor Hellmesberger..Del repertorio más frecuentado, Thielemann y la Filarmónica de Viena nos ofrecieron maravillosas versiones de los valses “Transacciones”, “Vida de artista” y “Armonía de las Esferas” y una formidable interpretación de la Obertura de la opereta de Johann Strauss “El barón gitano”, que contiene uno de los valses de Strauss más bellos y conocidos, servido bajo la experimentada batuta de Thielemann  con un manejo del rubato sensacional y un fraseo majestuoso, de indudable y genuino sabor vienés, con una coda electrizante, a lo grande.Para concluir un muy bello Danubio Azul y una excepcional “Marcha Radetzky” fraseada a lo Karajan, con toda su auténtica marcialidad.Brillantísima la Filarmónica de Viena, la mejor orquesta del mundo en este repertorio.Espectacular grabación.

 

LUIS AGIUS

Auditorio Nacional, 1 de Febrero de 2019

Gustav Mahler: Sinfonia no 6 «Trágica”

Orquesta Nacional de España

David Afkham, Director

La Orquesta Nacional de España , con su director titular al frente, David Afkham nos ofreció una magnífica interpretación de la Sexta Sinfonía en la menor “Trágica”· de Mahler, una de la sinfonías más complejas del genial compositor y en la que éste hace gala de un prodigioso alarde de instrumentación, dentro de una construcción sinfónica sólida, convincente y absolutamente abrumadora en lo sonoro,-requiriendo de la orquesta tanto un espectro dinámico amplísimo, como un gran refinamiento tímbrico- constituyendo esta Sexta Sinfonía el retrato más acabado y perfecto del fin de toda una época y de un estilo estético.En efecto , la sabia batuta de Afkham, un director todavía joven , más aún si consideramos lo dilatado de la carrera de un director de orquesta-que además es el músico que más tiempo tarda en “madurar-” puso de manifiesto la verdad mahleriana: la vida es como una sinfonía, una sinfonía debe ser como la vida. Asi , en un implacable y soberbio primer movimiento, lleno de drama y pathos, también lo lírico alcanzó cimas muy elevadas.De igual modo, asistimos a bellísimo y sublime Andante, un arrollador Scherzo y un trascendental Finale.La respuesta orquestal de la ONE fue extraordinaria, fruto no solo de los muchos ensayos sino de la entrega y de la convicción de los profesores de la ONE de que se encuentran bajo la dirección de uno de los directores de más talento y proyección del actual panorama internacional. Afkham se supero a sí mismo en otras versiones de Mahler que le hemos escuchando, logrando un perfecto equilibrio entre razón y emoción, muy de agradecer en la música de Mahler , que a veces o bien se nos ofrece en gélidas interpretaciones o bien en versiones vulgares y monótonas que nada aportan a la gran tradición y al formidable valor estético que estas magnas sinfonías mahlerianas atesoran.El mejor concierto de esta temporada hasta el momento sin lugar a dudas.

LUIS AGIUS

Henri Dutilleux: “Tout un monde  lointain” (para violonchelo y orquesta)

Gautier Capouçon, violonchelo

Franz Joseph Haydn: “Missa in Angustiis” (Misa de Nelson)” Hob XXII;11 para solistas, coro y orquesta

Christina Gansch, soprano,  Sophie Harmsen, mezzosoprano,,Robin Tritschler, tenor, Ludwig Mittelhammer, barítono

Coro Nacional de España

Orquesta Nacional de España.

David Afkham, director

★★★★

Imaginativo e interesantísimo programa el que tuvimos la ocasión de escuchar el pasado 26 de Enero dentro de la programación regular de la OCNE, de la mano de su magnífico director titular David Afkham y en el que contamos con un solista de auténtico lujo, el afamado violonchelista francés Gautier Capouçon, uno de los más reputados de la actualidad, especialmente en el repertorio romántico y moderno.En efecto, tuvimos ocasión de disfrutar de la extraordinario música de dos compositores distintos y distantes en el tiempo, estilo y forma, pero a los que une en común la magnífica factura de su música, el dominio del oficio de compositor y el servicio a los ideales más nobles: Henri Dutilleux, uno de los más importantes compositores franceses del pasado siglo (1916-2013) y Franz Joseph Haydn (1732-1809) uno de los más grandes compositores del Clasicismo.

Los intérpretes estuvieron a la altura de las espléndidas obras que integraban el programa: en Dutilleux, “Tout un monde lointain –basado en Baudelaire, un auténtico concierto para violonchelo “encubierto”, en cinco movimientos-Capoucón y Afkham actuaron en gran sintonía, con gran impulso rítmico, refinamiento y atención a la letra y al espíritu de la página, desplegando el solista francés un sobrio y elegante virtuosismo.En la maravillosa “Misa de Nelson” –una de las mejores de Haydn, quizá  la más contundente y hermosa-brilló sobremanera en un soberbio “Kyrie” la excelente soprano Christina Gansch, de bello timbre, gran volumen y probada musicalidad, así como el Coro Nacional y la orquesta con metales y timbales “ de época”. La dirección de Afhkam fue vibrante, intensa, rigurosa, de gran calado dramático, nunca ampulosa buscando siempre -y logrando- un Haydn absolutamente clásico y equilibrado pero sin renunciar a la emoción. Magnífico concierto.

LUIS AGIUS