SIMONE KERMES canta famosas arias de óperas y oratorios de

G.F.Haendel

Orquesta barroca  «Amici veneziani»

Boris Begelman, concertino

SONY CLASSICAL  190775861772

La gran soprano alemana Simone Kermes, gran especialista en el repertorio barroco, nos ofrece una espléndida interpretación de todo un ramillete de maravillosas y célebres arias de operas y oratorios de Georg Frederich Haendel, con las que este maestro he devenido inmortal: Rinaldo, Julio Cesar, Teseo, Rodelinda, Amadis de Gaula, El triunfo del tiempo y del desengaño, etc. Kermes luce  en todo momento su prístina voz, de un bellísimo timbre, con fraseo cuidadoso, delicado, muy bello, exquisito, desplegando en su caso un notable virtuosismo vocal.Sin embargo, más que tratarse de un disco de exhibición vocal, nos encontramos ante una selección de música donde reina el deleite, la serenidad y la exquisitez barroca.El acompañamiento del conjunto instrumental con instrumentos de época Amici veneziani es riguroso, brillante, delicado y absolutamente fiel al estilo .Sensacional grabación. Impescindible para los amantes del barroco y para quienes quieran conocer y disfrutar de estas joyas haendelianas, de conocimiento imprescindible.

 

LUIS AGIUS

Por Luis Agius

EL ENIGMA DE LEA: «EL EXITO DE UNA OPERA DE VANGUARDIA NO ES UNA POSIBILIDAD SINO UNA REALIDAD»

Rafael Argullol (1949) es ensayista, escritor, pensador, catedrático y autor del texto que sirve de base a la ópera “El Enigma de Lea”, a la que ha puesto música el compositor Benet Casablancas y que se ha estrenado en el Liceo de Barcelona con gran éxito de público y división de opiniones en la crítica.
Argullol, una de las grandes personalidades de la cultura de nuestro país, se acerca al PARNASO DE LAS ARTES y responde a las cuestiones que le planteamos sobre su experiencia operística y sobre su obra “El enigma de Lea” que ha publicado la prestigiosa editorial Acantilado.

PARNASO: Muchas gracias, Rafael por visitar el Parnaso de las Artes, es un gran honor para esta revista. ¿Qué lo motivó a escribir un texto para una ópera y por qué no le gusta llamarlo “libreto”?

R. A.: Sencillamente porque no lo es. En noviembre de 2011, Benet Casablancas me propuso hacer una ópera sobre un texto mío ya existente. Me quedé un tanto sorprendido y después pensé que era mejor escribir un texto nuevo y original. Desde el principio, Benet y yo mismo acordamos que debía tratarse de una ópera en la estela de Monteverdi, en la que la música y la poesía estuvieran en pie de igualdad. Si concebimos la ópera no como un mero soporte textual, el concepto de libreto es desafortunado y peyorativo. Con El Enigma de Lea, se trataba de recuperar el espíritu de la ópera, donde el texto no es un simple complemento. Por ello, mi escrito no se ajusta a la idea tradicional de “libreto”.

Parnaso: Si dijéramos que se trata de un texto no dramático, discursivo y filosófico, ¿estaría de acuerdo con estas afirmaciones?

R. A.: No. Se trata de un texto transversal, que establece una simbiosis continua de sensaciones e ideas. La filosofía para mí es narrativa. Cuando escribo un texto, lo hago pensando en su fusión con la música, en una trama, un argumento que tiene una estructura progresiva. Me parece absurdo una ópera sin ideas

Parnaso: Si nos refiriéramos a las óperas de Mozart-Da Ponte o de Schikaneder-Mozart , es decir , La flauta Mágica, ¿se sentiría identificado con esta forma de creación operística?

R. A.: No. El libreto de la Flauta es muy interesante, caótico, con elementos de iniciación masónicos muy atractivos, pero no me identifico respecto de mi labor en el texto de mi ópera. En el caso de Da Ponte, aun apreciándolo mucho como escritor y libretista, no tiene nada que ver con lo que he hecho junto a Benet Casablancas. De todas formas, tampoco me identifico con un cierto estilo actual de escribir textos para óperas contemporáneas, o “texto collage” a base de fragmentos dispersos o diferenciados, sin estructura. Puedo identificarme, es cierto, con Hugo von Hoffmansthal y con Stefan Zweig con sus textos o libretos para óperas de Richard Strauss, pero indudablemente mi opinión es que debe fusionarse texto y música y no me inspiré en ningún repertorio ni ópera o escritor en concreto.

PARNASO: Rafael, ¿considera usted que la ópera es un medio muy adecuado para la difusión de ideas? ¿Qué supone para un pensador involucrase en el mundo de la ópera, que tiene mucho de espectáculo, querámoslo o no? ¿Qué opina sobre los que critican la introducción de ideas o conceptos filosóficos en la ópera o el teatro, y acusan a los autores de estos textos o libretos de discursivos y anti-teatrales?

R. A.: A los que critican un teatro de ideas los invitaría a leer a los griegos y a Shakespeare. Es una cuestión de ignorancia. Por otro lado, la ópera del siglo XIX me parece un poco anacrónica. La ópera del siglo XXI, entendida como un espectáculo total, hay que acercarla a nuestra época: como no han de ser necesariamente cantables los textos o poesías que contiene, es adecuado que haya conceptos e ideas filosóficas

PARNASO: ¿Qué posibilidades tiene “El enigma de Lea” como ópera de vanguardia de llegar verdaderamente al gran público?

R. A.: No tiene posibilidades o mejor dicho ya es un éxito. El Liceo ha estado lleno a rebosar en todas las funciones y ya no debemos hablar de hipótesis sino de realidades. Una ópera contemporánea ha sido un éxito, que se ha producido, a través del boca-oreja. El resultado ha sido absolutamente satisfactorio. Podría y puede atraer perfectamente al gran público como toda ópera que se haga bien, basta con eso.Tengo esperanzas muy fundadas de que pueda verse en otros teatros.

PARNASO: Sin embargo, el panorama de la ópera, respecto de la ópera contemporánea, es complejo. Los programadores y directores artísticos tienen que contentar a todos los públicos y ofrecer tanto óperas del repertorio en montajes de “cartón piedra” como óperas de vanguardia que no son del gusto del público más conservador. Por otro lado, es obvio que estamos en un momento en el que prima la concepción de la cultura como espectáculo y, además, como espectáculo trivial. ¿Cómo ve Rafael Argullol el panorama cultural en España, en este aspecto y en general?

R. A.: Tanto el panorama cultural como el social lo veo dominado por la trivialidad y la ignorancia. Todo lo que va más allá del impacto parece muy arriesgado, pero, si no se arriesga, es lo mismo que en una clase o una conferencia, si bajamos el listón. Lo que hay que hacer es no ceder a una lectura de la existencia maniquea y trivial. Hay que transmitir la idea de que la Cultura es un instrumento esencial para vivir una existencia más placentera y dichosa. Lo que sucede en España en particular es que la Cultura se ve con menosprecio.Es algo que no he visto en ningún otro país de manera tan acusada. Se puede ser más o menos inculto, pero el nuevo “riquismo” y el simplismo que se traslada también a la política y a la educación es muy negativo. La respuesta está en contrarrestarlo.

PARNASO: Dado el éxito de esta aventura operística, ¿va a escribir Rafael Argullol otro texto para la ópera?

R. A.: Lo cierto es que no lo sé, me gustaría, pero es mucho trabajo y, además, me gusta ir renovándome. Es cierto que he tenido un par de ofertas y quizá es posible

PARNASO: Muchas gracias Rafael, enhorabuena y esperamos en todo caso cualquier otro texto o libro sobre temas filosóficos, estéticos, ensayos, etc. Libros como Viaje al fondo del mar, excepcionales, nos harán la espera más llevadera.

“Puccini in love

ALEZANDRA KURZAK, soprano

ROBERTO ALAGNA, tenor

Grandes escenas (duos) de óperas de Giaccomo Puccini (Tosca, Madama Butterfly, Manon Lescaut, La Boheme, la Fanciulla del West, La Rondine, Il Tabarro)

Orquesta Sinfonia Varsovia

Riccardo Frizza, director

SONY CLASSICAL 19075859832

★★★★

Los amantes de la ópera y de la maravillosa música de Puccini en particular están de enhorabuena con la publicación por SONY CLASSICAL de un disco compacto dedicado  a grandes escenas “a dúo” (escenas “de amor” ,como reza el título del cd, un tanto cursi, “Puccini enamorado”) que pertenecen a famosas y magníficas óperas del gran compositor italiano y que éste consagró a las voces de soprano y tenor y que corresponden en casi todos los casos a los grandes roles protagonistas puccinianos. En el caso de la voz de soprano, hablamos de Tosca, Madama Butterfly, Manon, Mimí, etc y en el caso del tenor a los “dramatis personaea” de Mario Cavadarossi, Pinkerton,  Rodolfo, etc. En el presente compacto la asunción de tales papeles corresponde  a las voces de dos estrellas rutilantes del panorama operístico actual, la soprano Alexandra Kurzak y el ya veterano  tenor Roberto Alagna, que cantan espléndidamente estos “dúos” o escenas a dúo, con ardor, pasión, ternura, emotividad y “vis dramtática”.A destacar la soberana prestación vocal de la excelente Kurzak, soprano dramática de poderosos medios vocales, pero capaz de cantar con lirismo e intimismo, voz carnosa de timbre muy bello, sin sobreactuar en ningún momento. Los papeles que asume son algunos de los más difíciles, tanto técnica como dramáticamente de la historia de la Opera y sale completamente airosa de ello.Por su parte, Alagna, menos dotado de medios vocales, luce su bello timbre, si bien a veces se resiente por la dificultad técnica y está forzado e incómodo, pero es cierto que lo suple con notable pasión y un indiscutible talento dramático. El acompañamiento orquestal es excelente, brillante, colorista y a ratos, espectacular, debido en gran parte a la magnífica batuta de Riccardo Frizza, buen conocedor de este repertorio ,sólido y experto director, que arropa y contagia de entusiasmo y energía a los cantantes. Sensacional grabación.

LUIS AGIUS

 

Concierto de Año Nuevo 2019

Filarmónica de Viena

Christian Thielemann, director

SONY CLASSICAL  2 CD 19075902822

 

En tiempo récord nos llega en todos los formatos audiovisuales posibles de la mano de SONY la grabación del tradicional Concierto de Año Nuevo de la Filarmónica de Viena,  del 1 de Enero de 2019, el concierto más famoso del mundo, en esta ocasión bajo la batuta del maestro alemán Christian Thielemann, un reputado intérprete wagneriano y uno de los directores más cotizados de la actualidad.El disco compacto recoge fielmente el concierto, que  fue absolutamente extraordinario y de gran interés por alternarse en el programa tanto el repertorio más transitado de valses , polcas, etc de la familia Strauss, como el más infrecuente.De este modo, Thielemann escogió con notable acierto el bellísimo vals de Johann Strauss “Nordseebilder” (“Vals de paisajes del mar del Norte”) raramente tocado, así como otras piezas de Edmund Strauss, deliciosas y de Josef Strauss (“Oper Soirée”, “La bailarina”) así como del compositor Hellmesberger..Del repertorio más frecuentado, Thielemann y la Filarmónica de Viena nos ofrecieron maravillosas versiones de los valses “Transacciones”, “Vida de artista” y “Armonía de las Esferas” y una formidable interpretación de la Obertura de la opereta de Johann Strauss “El barón gitano”, que contiene uno de los valses de Strauss más bellos y conocidos, servido bajo la experimentada batuta de Thielemann  con un manejo del rubato sensacional y un fraseo majestuoso, de indudable y genuino sabor vienés, con una coda electrizante, a lo grande.Para concluir un muy bello Danubio Azul y una excepcional “Marcha Radetzky” fraseada a lo Karajan, con toda su auténtica marcialidad.Brillantísima la Filarmónica de Viena, la mejor orquesta del mundo en este repertorio.Espectacular grabación.

 

LUIS AGIUS

Auditorio Nacional, 1 de Febrero de 2019

Gustav Mahler: Sinfonia no 6 «Trágica”

Orquesta Nacional de España

David Afkham, Director

La Orquesta Nacional de España , con su director titular al frente, David Afkham nos ofreció una magnífica interpretación de la Sexta Sinfonía en la menor “Trágica”· de Mahler, una de la sinfonías más complejas del genial compositor y en la que éste hace gala de un prodigioso alarde de instrumentación, dentro de una construcción sinfónica sólida, convincente y absolutamente abrumadora en lo sonoro,-requiriendo de la orquesta tanto un espectro dinámico amplísimo, como un gran refinamiento tímbrico- constituyendo esta Sexta Sinfonía el retrato más acabado y perfecto del fin de toda una época y de un estilo estético.En efecto , la sabia batuta de Afkham, un director todavía joven , más aún si consideramos lo dilatado de la carrera de un director de orquesta-que además es el músico que más tiempo tarda en “madurar-” puso de manifiesto la verdad mahleriana: la vida es como una sinfonía, una sinfonía debe ser como la vida. Asi , en un implacable y soberbio primer movimiento, lleno de drama y pathos, también lo lírico alcanzó cimas muy elevadas.De igual modo, asistimos a bellísimo y sublime Andante, un arrollador Scherzo y un trascendental Finale.La respuesta orquestal de la ONE fue extraordinaria, fruto no solo de los muchos ensayos sino de la entrega y de la convicción de los profesores de la ONE de que se encuentran bajo la dirección de uno de los directores de más talento y proyección del actual panorama internacional. Afkham se supero a sí mismo en otras versiones de Mahler que le hemos escuchando, logrando un perfecto equilibrio entre razón y emoción, muy de agradecer en la música de Mahler , que a veces o bien se nos ofrece en gélidas interpretaciones o bien en versiones vulgares y monótonas que nada aportan a la gran tradición y al formidable valor estético que estas magnas sinfonías mahlerianas atesoran.El mejor concierto de esta temporada hasta el momento sin lugar a dudas.

LUIS AGIUS

Henri Dutilleux: “Tout un monde  lointain” (para violonchelo y orquesta)

Gautier Capouçon, violonchelo

Franz Joseph Haydn: “Missa in Angustiis” (Misa de Nelson)” Hob XXII;11 para solistas, coro y orquesta

Christina Gansch, soprano,  Sophie Harmsen, mezzosoprano,,Robin Tritschler, tenor, Ludwig Mittelhammer, barítono

Coro Nacional de España

Orquesta Nacional de España.

David Afkham, director

★★★★

Imaginativo e interesantísimo programa el que tuvimos la ocasión de escuchar el pasado 26 de Enero dentro de la programación regular de la OCNE, de la mano de su magnífico director titular David Afkham y en el que contamos con un solista de auténtico lujo, el afamado violonchelista francés Gautier Capouçon, uno de los más reputados de la actualidad, especialmente en el repertorio romántico y moderno.En efecto, tuvimos ocasión de disfrutar de la extraordinario música de dos compositores distintos y distantes en el tiempo, estilo y forma, pero a los que une en común la magnífica factura de su música, el dominio del oficio de compositor y el servicio a los ideales más nobles: Henri Dutilleux, uno de los más importantes compositores franceses del pasado siglo (1916-2013) y Franz Joseph Haydn (1732-1809) uno de los más grandes compositores del Clasicismo.

Los intérpretes estuvieron a la altura de las espléndidas obras que integraban el programa: en Dutilleux, “Tout un monde lointain –basado en Baudelaire, un auténtico concierto para violonchelo “encubierto”, en cinco movimientos-Capoucón y Afkham actuaron en gran sintonía, con gran impulso rítmico, refinamiento y atención a la letra y al espíritu de la página, desplegando el solista francés un sobrio y elegante virtuosismo.En la maravillosa “Misa de Nelson” –una de las mejores de Haydn, quizá  la más contundente y hermosa-brilló sobremanera en un soberbio “Kyrie” la excelente soprano Christina Gansch, de bello timbre, gran volumen y probada musicalidad, así como el Coro Nacional y la orquesta con metales y timbales “ de época”. La dirección de Afhkam fue vibrante, intensa, rigurosa, de gran calado dramático, nunca ampulosa buscando siempre -y logrando- un Haydn absolutamente clásico y equilibrado pero sin renunciar a la emoción. Magnífico concierto.

LUIS AGIUS

SCHUMANN, Concierto para violonchelo op 129

Obras para violonchelo y piano, (op 73, 88, 70, 102)

 

Gautier Capouçon, violonchelo

Martha Argerich, piano

Orquesta de  Cámara de Europa

Bernard Haitink

ERATO 0190295634216

 

Precioso y excelente disco compacto el que presenta el sello ERATO con un bellísimo repertorio de páginas dedicadas al violonchelo romántico debidas a la inspiración del gran Robert Schumann (1810-1856) y que nos son servidas en bandeja de plata por el extraordinario violonchelista francés Gautier Capouçon, con la colaboración de insignes intérpretes como la formidable pianista Martha Argerich en las obras para cello y piano (piezas de fantasia, op 73 y op 88, etc) y la Orquesta de Cámara de Europa con el veterano maestro Bernard Haitink, un director de extremado prestigio.El resultado es magnifico por la elegancia, la nobleza del fraseo y la versatilidad de la que hace gala el cellista francés, uno de los más afamados del panorama internacional y cuyo amplio bagaje y talento demuestra en su particular duelo musical con una artista tan explosiva, temperamental, inquieta y experta como la maravillosa pianista argentina Martha Argerich. El concierto para violonchelo, donde Gautier Capouçon también se luce espléndidamente, encuentra una de sus ms fieles y redondas interpretaciones modernas con una excelente Orquesta de Camara de Europa, muy transparente y elocuente bajo la sabia batuta de Haitink.Disco compacto pues, imprescindible para los amantes del más noble de los instrumentos de cuerda, el violonchelo.Extraordinaria grabación.

 

Luis Agius

Orquesta Filarmónica de la Scala de Milán

Riccardo Chailly, director

Obras de Bartok, Moussorgsky/ Ravel y Mahler

Auditorio Nacional Madrid, . 23 y 24 Enero 2019 IBERMUSICA

La gran orquesta, de tradición operística, la mítica Orquesta alla Scala de Milán, denominada cuando da conciertos sinfónicos “Filarmónica della Scala”, titular del  teatro de Opera más famoso e importante del mundo, la gloriosa “Scala de Milán” , (junto a la Opera de Viena y el Metropolitan de Nueva York), visitó Madrid de la mano de Ibermúsica , con su director titular al frente, el gran maestro italiano Riccardo Chailly, experto y formidable director de repertorio sinfónico como  lo demostró con creces en las dos veladas, con obras fundamentales y sobradamente conocidas de los melómanos, el Concierto para orquesta de Bela Bartok (1943) , los Cuadros para un Exposición de Moussorgsky, en orquestación de Ravel y la Sinfonía nº 6 , en la menor “Trágica” de Mahler.Ambos conciertos fueron magníficos por todos los conceptos.La Filarmónica della Scalla demostró su altísimo nivel en un repertorio que en principio no es el suyo, pues básicamente es una orquesta de ópera, que interpreta todo repertorio dramático-musical, pero no el sinfónico.Al parecer Chailly quiere que esta explosiva orquesta, llena de oficio,  temperamento dramático, brillantez, color, magnífico empaste y con un metal y percusión formidables, se interne por el repertorio romántico del siglo XIX y el moderno de comienzos del siglo XX y , a tenor de lo escuchado en Madrid, los logros y los resultados serán sobresalientes.Bartok, lo más moderno, estuvo muy bien tocado y matizado, con refinamiento tímbrico y buen sentido rítmico.Los Cuadros de Moussorgsky fueron muy coloristas y tocados con gran efusividad y contrastes y Mahler, en su Sexta Sinfonía, una obra densa, compleja, llena de abismo y cimas., claroscuros, tormentas y pasiones fue recreada al mejor nivel de las orquestas centroeuropeas (Filarmónicas de Viena o de  Berlín, imbatibles en este repertorio) de manera sólida, contundente, lírica y épica. Chailly acertó en todo: tempi, fraseo, matices, estuvo elegante, refinado y colosal.El primer día , la orquesta nos deleitó con un bis que sí forma parte de su repertorio habitual , una obertura rossiniana “Semiramide” que sonó fresca, vibrante y muy italiana , pero sin ápice de vulgaridad. Solo resta decir, ¡BRAVO!

 

Ibermúsica celebró la navidad musicalmente ofreciéndonos, como es preceptivo y muy de agradecer, una espléndida interpretación  del “Mesías” de Haendel, el oratorio posiblemente más famoso que vieron los siglos, en un magnífico concierto donde brilló sobremanera el coro Capella Ámsterdam , la orquesta de instrumentos de época, “Orquesta del siglo XVIII” y la sensacional batuta de Daniel Reuss, auténtico especialista en este género y estilo.En efecto, con una plantilla de moderadas dimensiones (coro de 24 voces, 6 por cuerda) y una orquesta con un nutrido bajo continuo (órgano positivo, clave, un contrabajo y dos chelos) y una plantilla reducida a la habitual en una orquesta de cámara (alrededor de 20-30 instrumentos: cuerda, dos oboes, dos trompetas y timbales) la parte orquestal sonó transparente y refinada, con bellísimos adornos y matices, y con una amplísima dinámica.Daniel Reuss dirigió con maestría, gracias a un fraseo natural, elegante pero intenso, dotando en su caso de dramatismo a la música, y muy atento y cuidadoso a recitativos y transiciones y con una primorosa dirección coral.El coro, por su parte, estuvo soberbio, empastado, en su justa expresión, siempre matizando admirablemente y con un gran colorido y empaque (formidables los bellísimos fragmentos corales de la primera parte y el archiconocido “Alellujah”). Los solistas por contra, estuvieron desiguales-algo mejor el bajo- cumpliendo el resto aseadamente, si bien muy por debajo de la orquesta, coro  y director, de gran nivel.

 

Luis Agius

El oro del Rhin” de Richard Wagner opera en Cuatro escenas, Primera Jornada de la Tetralogía

“El Anillo del Nibelungo

Función del 22 de Enero de 2019,

Teatro Real de Madrid

Producción de la Opera de Colonia

Dirección de escena:Robert Carsen

Escenógrafo Patrick Kinmoth

Elenco

Wotan  Greer Grimsley

Fricka  Sarah Connolly

Loge    Joseph Kaiser

Alberich Samuel Youn

Freia   Sophie Bevan

Fasolt  Alexander Tsymbalayuk

Erda   Ronnita Miller

Mime  Mikeldi Atxalandabasso

 

Coro y Orquesta del Teatro Real

Pablo Heras-Casado, director musical

El Teatro Real de Madrid ha presentado para abrir 2019 la primera Jornada de la “Tetralogía”, “El Anillo del Nibelungo”, la ópera “El Oro del Rhin” (Das Rheingold)  donde Wagner sienta la base argumental de su magna obra, basada en la saga de los nibelungos, la antiquísima leyenda nórdico-germánica que sirvió de iconografía y puntal filosófico-estético al romanticismo alemán y que se ha perpetuado con éxito hasta nuestros días.La excelsa ópera wagneriana encontró una correcta, aseada y aséptica interpretación musical bajo la batuta de Heras-Casado, de buenos tempi pero ayuna de emoción (salvo algunos explosivos “climax”) y trascendencia, que brilló totalmente por su ausencia, al frente de una nutrida plantilla orquestal-seis arpas al final- como manda el canon wagneriano.En el comienzo, la  moderna puesta en escena (es evidente que el público madrileño no desea para Wagner una escenografía de cartón-piedra), llamó la atención en el excelente preludio a la primera escena.

Sin embargo, a medida que se desarrolló la función resultó  muy decepcionante ya que el prestigioso director canadiense Robert Carsen se quedó a medio camino entre lo transgresor y lo tradicional, un navegar entre dos aguas que también potenció la desangelada y oscura escenografía de Kinmoth, que buscaba quizá el misterio o lo ignoto de la leyenda, si bien al menos ha de agradecerse la falta de grandilocuencia tanto en lo escénico como en lo musical, aunque  lamentablemente “El oro del Rhin” perdiera mucho de su grandeza y majestuosidad.A lo gélido de la puesta en escena-o precisamente por ello- contribuyó asimismo la actuación del elenco de cantantes, los cuales, si bien vocalmente solventaron sus roles adecuadamente, les faltó algo más de transmisión, emotividad y vis dramática.El Wotan de Greemsley fue tonante y hierático , el Loge de Kaiser excesivamente contenido , muy distante, las hijas del Rhin , correctas pero les faltó algo más de empaque y el Alberich de Samuel Youn , el más dramático , bastante convincente, aunque más pucciciano o verista que wagneriano, lejos de la estirpe de los grandes cantantes de antaño.El Fasolt de Tsymbalayuk fue excelente y  Erda , encarnada por Ronnita Miller, apuntó unas excelentes maneras.En la próxima temporada asistiremos a la Segunda Jornada de la Tetralogía, la maravillosa “Die Walkürie” (La Valquiria) que esperemos tenga algo más de pasión y fuego que este “Oro” tan misterioso, pero oscuro y frío como el hielo.

 

LUIS AGIUS

Estimados amigos:

La Filarmónica de Hamburgo (Philharmonisches Staatsorchester Hamburg) su director titular, Kent Nagano y la violinista Veronika Eberle ofrecerán un concierto en Ibermúsica el próximo 22 de enero en el que se estrenará la obra Stairscape de Jesús Rueda y se interpretarán el Concierto para violín y la Sinfonía núm. 4 de J. Brahms.

Adjuntamos la nota de prensa con toda la información (también disponible en el siguiente enlace: NdP-Nagano), esperando que sea de su interés y agradecemos mucho toda la difusión que puedan darle.

nota prensa ibermusica2