“SENTIDO Y SENSIBILIDAD”

Muerte en Venecia, de Benjamin Britten, en el Teatro Real, con puesta en escena de Willy Decker, escenografía yfigurines de Wolfgang Gussmann e iluminación de Hans Toelstede.John Daszak tenor Alejo Pérez, director musical.Orquesta Sinfónica y Coro Titular del Teatro Real. Teatro Real de Madrid, Diciembre de 2014 Durante el pasado mes de Diciembre pudimos disfrutar en el Teatro Real de una extraordinaria puesta en escena de una de las más sobresalientes óperas de Benjamin Britten (1913-1976), “Muerte en Venecia” sobre el relato del mismo título del Premio Nobel de Literatura de 1929 , Thomas Mann.La “viscontiana” puesta en escena, escenografía y figurines (Luchino Visconti firmó en 1971 la película del mismo título, con su particular e inmortal visión cinematográfica) de Willy Decker y Wolgang Gussmann reconcilió al público madrileño con la “gran ópera”: creatividad, nulo espacio para la arbitrariedad, sentido y sensibilidad en relación al texto originario, al libreto y a la refinada, moderna, sensual y magistral partitura de Britten, conformaron una sesión operística de altísimo nivel, donde se hizo plenamente disfrutable el viaje a la “Muerte” de toda una concepción del Arte y del Mundo, su decadencia y su ineludible transformación y resurgimiento en un “Arte Nuevo” Vocalmente, el tenor John Daszak (en el papel de Von Aeschenbach)sostuvo bajo sus hombros el peso del drama con convicción, solvencia y credibilidad; muy eficaces e impecables los comprimarios y magnífico movimiento escénico y coreografía.

A destacar la magnífica iluminación de Hans Toelstede, que creó y sugirió espacios y ambientes, oníricos y reflexivos. Alejo Pérez dirigió a la orquesta con rigor,y con una propuesta coherente, que hizo fluir la música con gran naturalidad, si bien faltó refinamiento tímbrico y en algunos momentos algo de intensidad emocional , esencial en la música de Britten, siempre elegante,preciosista, profundamente racional y razonada, pero dotada de una intensa e íntima emoción.

LUIS AGIUS