FALSTAFF” de Giusseppe Verdi ópera basada en Las alegras comadres de Windsor de  W.Shakespeare (Libreto: Arrigo Boito)

Función del 30 de Abril de 2019

Teatro Real de Madrid

Producción del Teatro Real en coproducción con la Monnaie de Bruselas, Opera de Burdeos y tokkyo Nokkai Opera

Dirección de escena:Laurent Pelly

Escenógrafo Bárbara de Limburg

Elenco

De Candia, Evans, Barcellona, Iniesta, Piazzola, Beaumont, etc

Orquesta y Coro del Teatro Real

Daniele Rustioni, director musical

Cuando en una ópera se aúnan tantos talentos, es difícil que el espectador no quede defraudado.En  su última y magistral ópera “Falstaff” (1893) el gran maestro del género, Giusseppe Verdi (1813-1901) basándose en Shakespeare y apoyándose en el compositor y libretista Arrigo Boito – que preparó para el maestro un formidable libreto – nos ofrece una ópera espléndida, a medio camino entre lo bufo y la comedia de enredo más distinguida, con el sello verdiano del gran canto, pero lejos de los tremendos dramas que el maestro de Busetto abordó , con enorme éxito en sus grandiosas óperas dramáticas ( Rigoletto,Trovador, Don Carlo, Otello).Si a todo esto añadimos una magnífica y sofisticada , pero clara y limpia puesta en escena, con gran naturalidad en el movimiento escénico , un excelente elenco de cantantes que se divierten cantando-y nos divierten- y una extraordinaria dirección musical de Daniele Rustioni, idiomática, con nervio, sutil pero brillante y  elegante, no podemos sino suscribir el triunfo de este montaje de “Falstaff” un gran título operístico con el cual es fácil fracasar por su dificultad tanto vocal, como escénica.A destacar en el apartado canoro los roles femeninos, a cargo de Rebecca Evans, Daniella Barcellona y Ruth Iniesta y por supuesto el protagonista, el orondo , bribón pero bonachón Falstaff que encarna magníficamente Roberto de Candia. En buena línea el resto de cantantes todos muy acertados en los complicados quintetos, sextetos y conjuntos, etc con los que Verdi se despide de “su” género y de su larga y gloriosa carrera, bien resueltos por la batuta de Rustioni. El director de escena Laurent Pelly ( también figurinista) traslada el Falstaff a los años 60 del siglo pasado con sentido, sensibilidad, y un poder visual muy atractivo (escenografía estupenda de Bárbara Limburg), muy atento al movimiento escénico y a un sutil toque de comedia.En definitiva, éxito sin paliativos en el Teatro Real, con un “simpático” burlador “burlado” al que echaremos de menos, hasta la próxima ocasión…Chi Vediamo, caro Falstaff!!!

LUIS AGIUS